Con los años y a base de “ostias” y “oportunidades” que me ha traído la vida, creo que por fin he aprendido lo que dicta mi #Albertina de hoy.
“Si saber empezar es de maestros, saber finalizar es de sabios”
Es decir, he empezado muchas cosas como un aprendiz, a base de empezar me he acercado a cierta maestría en alguna cosa y claro está, me queda tanto por llegar a sabio si es que algún día llego, tampoco lo aceptaré supongo.
Saber empezar algo que te ilusiona mucho requiere muchas cosas. Requiere pasión, inteligencia, disciplina, constancia y otros tantos valores que te ayudan a superar las barreras que te pone el camino paso a paso.
Cuando has decidido empezar, normalmente has escogido tu mismo dicho camino. Ese camino que imaginabas era de una determinada manera pero claro, como el mundo es tan mutante y las personas somos tan complejas, aquello que previste o aquello que creías o lo que creían los otros, ya no es lo mismo. Y aquí queridos amigos, empieza la diferencia entre un maestro y un sabio.
Un sabio, como dice un programa de TV3, es aquel que tiene conocimientos, experiencia y memoria a largo plazo. Todo este unido, hace que un sabio sepa gestionar los tempos y sobretodo, tenga respeto no sólo para empezar, sino también para finalizar. Si, respeto por lo vivido y lo aprendido.
Si lo vemos así y somos capaces de separar la bondad de la maldad, seremos capaces de aprender porque lo maravilloso de la vida es esto, aprender, pegarte ostias, aprender y seguir creciendo, para acercarnos a nuestros retos.
A partir de ahora me prometo y comprometo a …
Seguir empezando cosas porque me gusta.
Seguir finalizando cosas porque toca finalizarlas para así poder empezar otras, para seguir aprendiendo y sobretodo, las que me toque finalizar a mi, miraré de finalizarlas mejor, manejando mejor los tempos y con el máximo respeto posible.
No guardo rencor y ni guardaré rencor porque aquellos que finalicen algo antes que yo, pues posiblemente no han sabido hacerlo mejor, o yo no supe aceptarlo y sino han querido hacerlo bien, tampoco perderé el tiempo con ellos.
En un futuro, prometo y me comprometo a seguir aprendiendo a mejorar los tempos, a mejorar el respeto .
Y sobretodo, cuando lo ves así y como ya digo hace tiempo, comprendes que en tu vida no hay EX (ni ex trabajo, ni ex jefes, ni ex amigos, ni ex parejas, etc) , sólo hay grandes personas que gracias a ellas has llegado dónde estas ahora. Por eso los llamaremos PRE, Pre de previo, presente, etc
Para finalizar recuérdate siempre.
“Si saber empezar es de maestros, saber finalizar es de sabios”