noviembre 18, 2018

Más personal, menos branding

¿En qué era estamos? ¿En una totalmente convulsa donde las personas tenemos que aprender a gestionarnos en medio de este caos que nos rodea? ¿En qué lo digital y lo branding nos han vuelto medio locos y corremos el riesgo de vivir una versión actualizada del mito de la caverna de Platón? ¿Antes eran sombras y ahora imágenes en Instagram, tuits, posts, etc.?

Todo esto me hace pensar en tres cosas que me gustaría compartir en la columna de hoy. La autenticidad, el intrusismo y la ejemplaridad sostenida.

Como hablaba el otro día con Paula Fernández Ochoa, experta en marketing jurídico, para mí y para ella, lo que requiere un entorno como el actual es la autenticidad, es decir, personas que se muestran tal como son o, mejor dicho, tal como sienten. Personas que se atreven a decir una cosa y llevarla más allá del éxito esperado, de los miles de followers o de cualquier otro tema.

El segundo punto que quisiera comentar es uno de los daños que han traído consigo las nuevas tecnologías, el intrusismo se ha puesto en primera línea. En los años 90 todos teníamos un amigo que te montaba en ordenador, luego te hacía la página web y ahora pasa con los community manager y con el personal branding. Cada día hay más supuestos expertos que realmente personas dispuestas a pagar por ello.

El tercer punto es la ejemplaridad sostenida. Está bien descubrir nuestra esencia y darla a conocer para así potenciar nuestra marca pero para mí, lo más importante y a su vez más complejo, es la ejemplaridad sostenida en el tiempo. Dicho en otras palabras, esa persona, si realmente es auténtica (no un personaje) conseguirá dar ejemplo de una forma sostenida en el tiempo y no sólo en unas campañas concretas. Es decir, si es una persona durará más tiempo, si es un producto o marca durará menos.

No estoy diciendo que el conocimiento personal no sea necesario, sino al contrario. Tampoco digo que el branding sea prescindible. Sólo quiero digo que debemos priorizar a las personas en sí y apostar por un buen branding , sostenido en el tiempo. Es como si miramos de comparar a Ferran Adriá o los hermanos Roca con los concursantes de MasterChef. Supongo que se ve la diferencia…

Hay que seguir apostando realmente por las personas como prioritarias y aprender a utilizar la marca, la intensidad y su longevidad. En un mundo volátil es más fácil crear cosas rápidas, pero, aunque sea más duro y más complejo, es más necesario crear personas y marcas más allá de la marca, con referencia e influencia fuera de la red.

 

Comparte esta historia

Subscribe to the newsletter

Fames amet, amet elit nulla tellus, arcu.

Gracias por su mensaje. Se envio correctamente.
Hubo un error al enviar el mensaje. Por favor vuelva a intentarlo mas tarde.