Me acuerdo en el año 2010, mi buena amiga Xantal Llavina me dijo que yo tenía que hacer radio porque según ella, yo ‘hablaba mucho con titulares’.
Para ella, hablar con titulares es transmitir cosas con pocas palabras, que más o menos se entiendan y que sea de fácil comunicación. No sé si lo hice muy bien o no pero si que gracias a ella estuve colaborando en la radio durante más de seis años.
Posteriormente me adentré en el mundo de la escritura de libros y experimenté esa sensación del ‘titular’ pero en forma de titulo del libro. El ejercicio de pensar si primero va el título o primero el contenido para luego poner título. En mi caso, siempre primero el título.
Y esto, también aplica a las empresas.
Podemos tener un producto o servicio, genial funcionalmente y de gran aportación de valor pero claro, debe ir acompañado de un bueno titulo
Todos hemos visto algún producto o servicio con una brillante propuesta de valor pero la forma de comunicarlo, es sin titular y claro, sin eso, dar a conocer el producto y hacer marketing sobre ello, es más difícil. Aquí, el titular es un problema
Otras veces hemos visto productos que no entiendes como va a sobrevivir económicamente, pero tiene un excelente titular que le ayuda a comunicar. Aquí el titular ayuda a vender en fase inicial pero a medio largo plazo, se deberá hacer algo y buscar otro titular.
Y todo esto me lleva a una reflexión que estoy viviendo estos días con un tema de nuestra empresa.
¿Cambiando el titular de un producto o servicio podremos convertir ese problema en un poder?
Sólo hay una manera de saber.
Cambiando el titular
